La energía del centro del país depende de los proyectos Norte y Sogamoso: un llamado urgente a garantizar su avance

Viernes, 07 de Noviembre de 2025

Sumario | El atraso en la entrada en operación de los dos proyectos, pese a su avance a satisfacción, no solo compromete la seguridad energética, sino también el desarrollo urbano, social y económico de la región central del país.

El corazón energético de Colombia necesita latir con fuerza y estabilidad. Hoy, más del 32% de la demanda nacional de energía eléctrica depende de la red que atraviesa el centro del país, y garantizar su seguridad y confiabilidad es una prioridad nacional. En este contexto, los proyectos Norte y Sogamoso, liderados por Enlaza, filial del Grupo Energía Bogotá (GEB), son mucho más que obras de infraestructura: son la columna vertebral que asegurará el suministro energético para millones de colombianos.

Una necesidad impostergable

El crecimiento urbano y la expansión de proyectos de vivienda y desarrollo industrial en Cundinamarca, Boyacá y Santander, ya enfrenta una realidad preocupante: la imposibilidad de garantizar energía eléctrica a las nuevas construcciones. Los retrasos en la ejecución de los proyectos Norte y Sogamoso amenazan con agravar esta situación, generando riesgos de apagones y restricciones en el suministro para hogares, empresas e instituciones esenciales del centro del país.

“Estos proyectos no pueden esperar más. De su entrada en operación depende la confiabilidad del sistema eléctrico colombiano y la calidad de vida de millones de personas”, afirma Juan Ricardo Ortega, presidente del Grupo Energía Bogotá.

Actualmente, el proyecto Norte —que recorre 162 kilómetros entre Cundinamarca y Boyacá— alcanza un 80% de avance, mientras que Sogamoso, con 383 kilómetros entre Santander, Boyacá y Cundinamarca, llega al 79%. En conjunto, representan más de 1.200 torres que garantizarán el flujo estable de energía hacia una de las zonas más dinámicas y pobladas de Colombia.

La energía que sostiene el desarrollo

El atraso en la entrada en operación de los proyectos no solo compromete la seguridad energética, sino también el desarrollo urbano, social y económico de la región central del país. La demanda de energía en este territorio crece año tras año, impulsada por la expansión habitacional, la industria y los servicios. “Hoy, ya hay urbanizaciones completas esperando conexión. Es una alerta temprana de lo que podría venir si no aceleramos la puesta en marcha de Norte y Sogamoso”, añadió Ortega.

Los proyectos, además de su relevancia técnica, aportan un modelo de desarrollo responsable. Desde su diseño, Enlaza ha priorizado la protección ambiental y el diálogo con las comunidades, desarrollando más de 335 iniciativas sociales y más de 70 trámites ambientales, que garantizan un equilibrio entre progreso y sostenibilidad.

Un compromiso con la vida y el futuro

Enlaza mantiene su compromiso con un desarrollo energético seguro, confiable y respetuoso con el territorio. La compañía trabaja de la mano con el Ministerio de Minas y Energía (MME), la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla) y demás entidades competentes para resolver los trámites pendientes que hoy limitan la continuidad plena de las obras.

Cada día cuenta: los proyectos Norte y Sogamoso son claves para evitar sobrecargas en el sistema, reducir la dependencia de plantas térmicas contaminantes y consolidar el avance hacia una Colombia más sostenible, justa y moderna.